Esto es lo que entendió LABPLAS, una PYME de Sainte-Julie en rápido crecimiento.

Línea verde

Por Emmanuelle Gril, el Journal de Montréal

Empleado en una planta llenando una caja

Fundada en 1987, LABPLAS comenzó su transformación digital en 1994. Hoy en día, su planta está prácticamente completamente conectada, y los cambios tecnológicos han generado mucho valor agregado.

En la industria farmacéutica, alimentaria, investigación ambiental y ciencias veterinarias, LABPLAS está presente en estos diferentes sectores a los que proporciona soluciones de muestreo estéril para fines de análisis. Los productos de esta empresa de Sainte-Julie se venden en más de 50 países a través de una red de 175 distribuidores. Este crecimiento se basa no solo en su experiencia y conocimientos, sino también en la explotación de datos.

Fábrica 4.0

Todo comenzó con la implementación de un primer sistema de gestión de recursos, seguido de un software de gestión de relaciones con el cliente. Posteriormente, se desarrollaron soluciones de software para automatizar la recopilación de datos relacionados con la gestión de calidad, la gestión de procesos industriales y la gestión de inventarios.

«Pero está bien ser un ‘datavore’, ¡aún es necesario saber qué hacer con toda esta información y extraer valor de ella!» señala el director general, Benoît Brouillette. En LABPLAS, pudieron generar informes de manera automática, identificar dónde se producían pérdidas de tiempo y, en última instancia, mejorar la producción.

«Por ejemplo, pudimos identificar qué tipos de paradas o interrupciones ocurrían con más frecuencia y en qué máquinas. Una vez hecho esto, instalamos un robot, lo que solucionó el problema. Luego equipamos nuestras 20 líneas de producción de la misma manera y el retorno de esta inversión solo tomó unos pocos meses«, ilustra.

Tomar decisiones mejores

Con todas las máquinas de producción conectadas, LABPLAS se ha convertido realmente en una fábrica 4.0. De los 100 empleados de la empresa, 15 se dedican por completo a las necesidades digitales. «Valoramos los datos no solo para ayudar a mejorar la gestión y los procesos, sino también los comportamientos en el piso de producción. La belleza de los datos es que nos permiten respaldar todas nuestras decisiones con cifras e indicadores de rendimiento«, destaca el director general.

Esto también contribuye a reducir los transportes innecesarios. «Por ejemplo, basándonos en los informes de pedidos, al comienzo de cada mes, trasladamos al primer piso del almacén todas las paletas de productos ubicadas en los pisos superiores y que deben entregarse en el mes actual. De esta manera, evitamos desplazamientos innecesarios y maximizamos el proceso de envío«, detalla Benoît Brouillette.

Otros proyectos también están en su radar, incluido el seguimiento en tiempo real de las actividades de la organización. «La transición 4.0 nunca tiene fin, ya que la tecnología está en constante mejora. Seguimos creciendo y continuando la valorización de todos los datos de los que disponemos«, concluye.